Manuel López – La República Cultural
Problemas que en largometrajes suele ser más común verlos en parejas jóvenes pero que en esta décimo primera película de Richard Loncraine son trasladados a un matrimonio maduro. Él un medianamente conocido pintor de retratos que se ve abocado a un cambio de estilo por sus marchantes ya que el mercado no quiere este tipo de obras y ella una jubilada que ven como su quinto piso sin ascensor en Brooklyn empieza a ser un problema.
Casa que se compraron juntos cuando se casaron 45 años atrás y muy criticada por sus conocidos por ser una zona por entonces pobre. Ahora, en cambio, es un barrio de moda y, aunque les gusta su casa y el barrio, las impresionantes vistas del ático junto a la edad de ambos empieza a ser un impedimento para realizar tareas comunes en un edifico viejo sin ascensor. Por ello se plantean su venta y más cuando su pequeño perro también demuestra problemas de salud.
Un cambio de rumbo tras una vida llena de éxitos profesionales pero también manchada de afrentas (un matrimonio interracial hace 45 años no estaba bien visto) que ahora se planean modificar para descansar y disfrutar de su tiempo en común. La sobrina de ella (Cynthia Nixon) será la feroz vendedora encargada de poner a la venta el piso y de devorar a los compradores para lograr el máximo dinero por el piso de su tía (y de su comisión por la venta).
Pero, aunque el piso es aparentemente perfecto, la situación no.
Los guionistas inteligentemente introducen en este contexto un accidente de un camión lleno de productos peligrosos en el puente que une Manhattan al resto de la ciudad y la paranoia por un ataque terrorista. Los precios de la zona bajan mientras el conductor está huido, lo que lleva a que la especulación caiga: se deba vender rápido y sangrar a los clientes para comprar rápido y sangrar a los vendedores. Una deshumanización de esa idílica pareja que acaba por romperles por un afán desmedido por el dinero hasta que se dan cuenta de lo absurdo de la situación.
Una crítica mordaz oculta (al miedo, a la especulación,…) tras una historia romántica preciosa con una factura del director realmente artesana y una actuación sublime por parte de sus actores principales que por desgracia caerá en el olvido, como muchos interesantes largometrajes que sólo descubrimos por casualidad. No os la perdáis.