Manuel Gil Rovira – La República Cultural
Conversando con una colega me entero de que durante estas navidades, el 5 de enero de este incipiente 2017, ha fallecido el maestro Tullio De Mauro (Torre Annunziata (Napoli) 31 de marzo de 1932- Roma 5 de enero de 2017) a los 84 años de edad. La colega Nencioni no da crédito a que yo pueda no haberme enterado todavía, pasados casi quince días del fallecimiento de Tullio. Su cara muestra algo parecido a un “¿en qué mundo andas viviendo?” y la entiendo y me lo pregunto a mí mismo. Tullio ha muerto con la Befana y tú pensabas en los reyes magos o en otras cosas y en otras cosas, otras, otras…
Sí, en otras, otras… que están siendo tu vida cotidiana y su reflejo lengua. Y, entretanto, se ha ido muriendo el maestro de tu palabra/vida, el maestro de tanta palabra/vida.
Tullio De Mauro es el lingüista y el referente de pensamiento de tantas generaciones de académicos italianos desde los años ‘60 del siglo pasado. Y es, a la vez, un lingüista, un referente de pensamiento de los italianos, no necesariamente académicos, desde los años ‘60 del siglo pasado. Tullio es el intelectual comprometido en todos los espacios desde la solvencia de quien, abundando en el trabajo de su entorno profesional, la lingüística y la filosofía del lenguaje, lo presenta como la realidad histórica que se conforma como el índice de las relaciones humanas que con la lengua se estabilizan y concretan; como una institución entre las instituciones que han cristalizado las relaciones humanas en la realidad italiana y más allá.
En el año 1963, Italia andaba contruyendo todavía una historia unitaria de su lengua mirando, como era necesario, a sus años y siglos pasados, a sus textos canónicos. Repito, aquello es y era necesario. Pero en ese momento, irrumpió en el escenario del pensamiento la Storia lingüística dell’Italia unita(1) de De Mauro. La base del análisis se rompía. El salto se daba desde los textos canónicos que habían informado el acercamiento al hecho lengua italiana, hacia la lengua que se empezaba a producir desde el momento de la Unidad y a entender que, para abarcar la comprensión de la producción lingüística anterior y coetánea, quizá la información más concluyente se debería extraer de las composición de las poblaciones, hasta de los censos concretos o intuibles evindenciadores de la composición de los centros urbanos, de las comunidades de seres humanos que son y han sido los hablantes. La Storia lingüística dell’Italia unita, obra de extraordinaria solidez conceptual para los especialistas en la materia lingüística, en la historia de la lengua italiana, y aún hoy entendida como un referente, se convierte además en un elemento de discusión poco menos que cotidiana, a pie de quiosco, en la Italia de entonces que se piensa, que piensa su lengua popular.
En esos mismos años, De Mauro publica su traducción del Corso di lingüística generale de Ferdinand de Saussure(2). Es su traducción, son sus notas y son su introducción. No me cansaré, no me he cansado nunca de decirle a mis alumnos que es la mejor edición que existe aún hoy, en 2017, del “Curso”. Cuando nuestros “estructuralistas” seguían haciendo hincapié en el aspecto de la langue, la “norma” como descriptora del acto lingüístico, De Mauro seguía empeñado en decir que, si bien este era el aspecto que se había llegado a desarrollar en lo conocido del “Curso”, Saussure había establecido desde el principio una dicotomía indisociable en la que “norma” y “habla”, langue y parole no podían entenderse sino en conjunto. La palabra actuada, la palabra en sociedad, la palabra en colectivo llenándose de acción y de significado era la base de la definición de esta. La interacción de los hombres interactuando era la lengua. Era la base de la lengua. Los seres humanos hablando son la lengua. “Si abusa delle parole?” se le preguntará tiempo después. “Si abusa spesso, ma è impossibile sanzionare l’abuso di parola”, contestará él.
Compromiso laboral, intelectual, ciudadano y político irán siempre de la mano en la biografía de Tullio De Mauro. Lo conocí personalmente en un congreso de la Società di Lingüística Italiana (SLI) en Padua en 1984. En el congreso se hablaba de italianos regionales y de minorías lingüísticas. Tema, el de las minorías, que él trataría tantas veces enfrentando realidad con legislaciones reales de aquel tiempo, y posibles. Porque en todo momento entendía la acción del lingüista, del pensador, como necesaria. Desde aquellos textos, en los que incluso se analizaban legislaciones nórdicas, soviéticas, yugoslavas, suizas… a su posterior Scuola e linguaggio, se mantendrá siempre un hilo de análisis y de acción queriéndose adecuar al momento. Se comprometerá en cargos públicos, hasta la aceptación del cargo como ministro de la Pubblica istruzione entre los años 2000-01. De esos textos y de sus acciones y opiniones sobre la organización de la educación en Italia se nutren aún hoy los planteamientos de lingüistas, sociólogos, pedagógos, etc… en los prcesos de gestión de la diversidad ante las nuevas poblaciones migrantes.
Digo compromiso intelectual y biografía de la mano. Esto le llevaría a ostentar cargos como independiente de la mano del PCI o a colaborar con editoriales como Editori Riuniti y en revistas de opinión política como Rinascita y su entorno editorial. Compromiso siempre a pie de calle y lengua, dialetto, y a pie de aula y de academia. A pie de aula y academia significa autoinculparse dentro del manifiesto de Lotta Continua, para apoyar la existencia del periódico y movimiento, criminalizado tras la strage di Piazza Fontana
Mis alumnos saben que sigo manteniendo que el mejor diccionario de uso, con toda la información necesaria y más, del italiano sigue siendo el de Tullio. Porque el lexicógrafo que lo coordina se nutre, además de la solvencia técnica que le es necesaria, de esa necesaria idea de lengua trabajada a pie de calle, de aula, de academia. A pie de pueblo y sus minorías sociales.
Maestro, poco después de Padua nos vimos en Madrid. Yo estaba, y después salía de un colegio electoral como interventor y me animaste a continuar. No sé si como militante de colegio electoral o pensando así con la lengua. Aún lo hablamos más veces en Madrid, Galapagar y Roma. Hoy sólo, hasta luego y gracias. Lo seguiré pensando. Nos vemos.
(1) Tullio De Mauro, Storia lingüística dell’Italia unita, Bari, Lterza, 1963. Muy interesante el paso siguiente, donde quiere cerrar el ciclo de estudios: Storia lingüística dell’Italia republicana dal 1946 ai nostri giorni, Bari-Roma, Laterza, 2014.
(2) Ferdinad de Sassure, Corso di lingüística generale, Bari, Laterza, 1967.