Nota de prensa
La obra nace para homenajear una vez más (y nunca lo suficiente) a la mujer, todavía hoy, privada a menudo de dignidad y derechos. Ellas, portadoras de un sino irreversible de humanidad. Condenadas a la esclavitud de la reproducción de la especie, especie devastada y sin apego a sus orígenes. Ellas, incluso las más destructoras, tienen algo que enseñarnos, todas tienen una historia digna de ser contada. Elegimos a cuatro personajes mitológicos: Medea, Fedra, Hécuba y Políxena, para transportarlas a la actualidad.
La música de Lila Downs nos ha acompañado en el viaje. Viaje griego-cristiano que sin saber cómo, acabó en una alegoría de lo ritual, pero también de lo pagano. La mujer fértil, madre, amante, sumisa, infértil, hija, mujer… todas quedan reflejadas, todas luchan contra su destino. Todas tan diferentes pero tan iguales.
En un principio sólo pensamos trabajar con estos personajes clásicos, pero sin saber cómo Lorca llamó a la puerta y se la abrimos de par en par para darle la bienvenida. A veces mujeres con culpa, otras, mujeres fatales, pero en todo caso, mujeres. “Son mis pecadoras… démosles las gracias”, dice Joaquín Gómez. Medea, Fedra, Hécuba y Políxena, personajes de ayer que nos hablan a nosotros, espectadores de hoy. Salen del mito para instalarse en nuestra conciencia y hacerse contemporáneos, como una cruel metáfora del presente.