Alberto García-Teresa – La República Cultural
Una rabiosa necesidad insurreccional impulsa la poesía de Jorge Maíz Chacón. De ahí el aliento rebelde de este Los suculentos quejidos de la turba; el tono amenazador que construye con símbolos y también mediante alegorías una práctica discursiva de la insumisión.
En esta obra, Maíz Chacón trata de hacer visibles los mecanismos de sometimiento que lleva a cabo el Poder a través de poemas breves, no exentos de ironía. Señala, así, el control social y de pensamiento, además de desmontar la maquinaria que perpetúa la falsa democracia en la que vivimos.
En efecto, un profundo talante antiautoritario empapa toda su escritura. Denuncia la incomunicación, el individualismo, y apela a lo colectivo: enuncia sus versos desde el “nosotros”. También figura la memoria y el recuerdo de las víctimas con elemento central en el poemario. Asimismo, aparece una tendencia naturalista, que busca regresar a la esencialidad a través la recuperación del contacto con las otras especies vivas (aunque con menor presencia que en su anterior Muchedumbres).
Así, Jorge Maíz Chacón nos propone una poesía explícita, encendida y directa.